La arquitectura es la rama artística que más destacó en el arte de la Edad Media, tanto durante el periodo de arte románico como durante la etapa de arte gótico. En ambos casos, a pesar de las diferencias constructivas, los encargos principales los hacía la Iglesia Católica que por aquel entonces dominaba toda Europa. Repasamos las principales características de la arquitectura gótica.
Introducción – La catedral gótica
No hay mejor evidencia de la calidad del arte cristiano (románico y gótico) durante la Edad Media que las catedrales góticas. El estilo gótico apareció por primera vez en la ciudad de Saint Denis donde en 1137 se construyó la primera catedral de características diferentes a las del arte románico, este nuevo diseño revolucionó la construcción eclesiástica a lo largo del siglo siguiente hasta establecer la arquitectura gótica totalmente desmarcada de la románica.
La arquitectura románica se caracteriza por sus techos redondeados, las gruesas paredes con pocas aberturas y ventanas que hacían que el interior de los edificios fuera muy oscuro, se sustituyó por los altísimos arcos góticos, las paredes delgadas y las enormes ventanas que inundan el interior de luz.
El diseño arquitectónico gótico sustituye el techo de bóveda y emplea elementos constructivos fuera de la catedral para repartir el peso de la estructura y así realizar paredes más delgadas y cambiar radicalmente el interior de la estancia y favorecer la experiencia visual de los espectadores con grandes vidrieras y la luz solar.

En el interior, todo parecía delgado y frágil y el exterior, mucho más grande y con más estructuras de sustentación fue decorado con una gran variedad de relieves y esculturas. El interior del mismo modo se encontraba ampliamente decorado con fuentes, mosaicos, púlpitos, manuscritos… todo ello hace que las catedrales góticas sean consideradas como grandísimas obras de arte. Ejemplos de este tipo de construcciones son la Catedral de Notre Dame en París y la catedral de Chartres.
Características de la arquitectura gótica
A continuación resumimos las 7 principales características de la arquitectura gótica:
- Edificios muy altos y enormes. Las nuevas tecnologías de construcción permitieron sustituir las gruesas y bajas paredes del románico por altas y delgadas paredes repartiendo el peso entre otros elementos arquitectónicos (no solo las paredes como hacía el románico)
- El empleo del contrafuerte. Es la principal técnica empleada por los arquitectos para repartir el peso, pero además también se convirtió en un elemento decorativo característico de las iglesias y catedrales góticas.
- El arco ojival. Los arcos de medio punto románicos se sustituyeron por los arcos ojivales o de punto, esto permitió hacer estructuras más estrechas y altas.
- El techo abovedado. De nuevo un elemento que permite repartir mejor el peso y aumentar la altura de las edificaciones.
- Interior luminoso y espacioso. Con paredes y cúpulas acristaladas con vidrios pintados que dejaban entrar gran cantidad de luz.
- Gárgolas. Las gárgolas son un elemento gótico muy reconocido, se trata de un elemento decorativo y funcional a la vez, son cabezas de criaturas monstruosas por cuya boca se desalojan las aguas de las lluvias.
- Ornamentación. Las catedrales y en general los edificios góticos se encuentran ampliamente decorados con miles de esculturas y relieves que en ocasiones narran pasajes de la biblia o representan a apóstoles, santos y demás elementos bíblicos.

Principales edificios góticos
A continuación presentamos una lista con los principales edificios construidos según la corriente artística gótica.
- Catedral de San Esteban, Viena
- Catedral de Notre Dame, París
- Catedral de León, España
- Catedral de Canterbury
- Abadía de Westminster
- Catedral de Milán